Según Osho y un montón de gente más que no recuerdo ni me interesa, todos tenemos nuestra pequeña voz interior; ésta que nos dice qué hacer y esperar en determinadas situaciones, esas corazonadas o como yo vulgarmente y ridículamente llamo "pálpitos" se deben a la mismísima voz interior que apunta las cosas que -posiblemente- pueden ir bien o mal.
Conmigo sucede una cosa; sólo puedo "premeditar" en cierto modo las cosas que saldrán mal, quizás se deba a mi persistencia de habitar en el pesimismo, pero por un tema de expectativas (tratado en cierto modo en el post anterior) busco en todo momento ponerme en el caso que sucedan las peores situaciones, para no ilusionarme y tener un plan B ante todo.
Al., me había invitado a Viña...para ser más específica, me autoinvité sola (qué weá más penosa) y él dijo que sí (creo que por un tema netamente de cordialidad), pero con el pasar de los días y a pesar que estaba muy emocionada de ir a un lugar lindo a pasear como todos mis conocidos, en el fondo de mi corazón (si es que aún me queda algo) algo me decía, corrijo, todavía me dice que ir será una muy mala idea, sobretodo porque sigue teniendo contacto con su ex y creo que tiene onda con alguien más (no sé, con alguna de las dos debe ser, dudo que con las dos al mismo tiempo), y no quiero maltratar mi corazón con algo que no podrá ser, aparte me sentiré sola porque queda lejos de casa y no tendré a nadie a quién contarle algo.
Sé que no estará ni cerca de que tengamos algo como la gente algún día, porque las cosas no están ni estarán para qué suceda, entonces...para qué?
( De hecho, en este mismo momento, le estaba contando a Al. que no iría a su casa y ni me pescó, me dijo que iba a salir y que hablábamos más tarde...ven? mi voz interior no estaba equivocada, iba a ir a puro webiar, lo más probable es que me iría a contar su romance con x, no no no, no estoy para eso, estoy aburrida de ser el paño de lágrimas de todos)
Ayer, mi mamá se sacó la suerte (cosa que me divierte, pero que me cuesta creer) y según ella, preguntó harto por mi, le dijeron que me iría bien en la u, que me exigiría mucho este año, que en abril terminaría todo contacto entre D y yo, y (la parte más sabrosa) que por julio conocería a alguien de la universidad que trabaja y estudia...ya?
No sé, hace bastante tiempo que no me imagino conociendo a alguien, a una persona que me haga sentir cositas (me refiero a esa sensación de los primeros meses), de esos romances como la gente, no weás grises que siempre me pasan y que me tienen así de amargada, pero me cuesta creer, me pongo a pensar ¿cómo puede suceder algo así y más encima a mi? La voz interior de las cosas buenas se murió hace rato en mi, dejando la idea que siempre serán las cosas como son ahora: aburridas.